martes, 21 de junio de 2011

EL VERDADERO CAMBIO ESTA EN LA CONCIENCIA

Hola amigos definitivamente el comienzo de la verdadera vida se inicio desde nuestro interior cuando decidimos ser los protagonistas y estar verdaderamente presentes aplicando el poder que nos fue otorgado para desarrollar de una manera integral nuestra mision en la vida. Por ello voy a compartirles unas notas de Gunther Emde quien se dedica a promover el Silencio Interior en toda persona que sienta la profunda necesidad de un Cambio en su Vida.

La transformación interior constituye el objetivo primordial para todos en estos nuevos tiempos, no es posible transformar el ego desde el ego.
¿Puede un organismo biológico transformarse? Obviamente, no. Un animal no puede transformarse a sí mismo. Un animal funciona según sus propias reglas fisiológicas e instintivas. Nuestro cuerpo es un animal, puede ser sometido a un maquillaje más o menos elaborado, pero no podrá modificarse su esencia, su “corporalidad”.
Ahora bien, en el ser humano nació una segunda entidad, la mente, que pasó a controlar el cuerpo. De repente, los movimientos espontáneos, dictados por los instintos, fueron sustituidos por miles de actos totalmente nuevos, ajenos por completo a la biología, y que procedían de las demandas de esa nueva entidad.
¿Y puede la propia mente ser transformada? Me temo que, como en el caso del cuerpo, la respuesta es también negativa.
La mente tiene sus propias reglas de funcionamiento. La esencia de su funcionamiento, su tendencia a virar de un polo a su opuesto, a intelectualizar, a juzgar, a sentirse por encima o por debajo de sus semejantes, todo eso no puede transformarse, ni falta que hace. La mente, como el cuerpo, tiene su propio y extraordinario “metabolismo”. La diferencia del cuerpo, es consciente de que sufre, y por tanto desea “mejorar”. El cuerpo no desea mejorar, pues no es consciente de su dolor, lo cual le permite tratar directamente con ese dolor. La mente es incapaz de enfrentar directamente su sufrimiento, debido a que crea una distancia entre ella y el sufrimiento, una distancia que es fruto de la conciencia que tiene de sí misma.
La mente, tarde o temprano, comprende que es un instrumento excelente para las tareas de la vida diaria, para lanzar cohetes a la Luna, para resolver complicados enigmas físicos y matemáticos, pero totalmente incapaz de resolver su propia infelicidad. Así que, si existe la transformación del cuerpo, es sólo porque esa transformación procede de algo que trasciende al cuerpo, y ese algo es la mente. Entonces, podemos deducir que sólo la emergencia de una nueva entidad puede transformar la mente. Esa entidad es la CONCIENCIA.

La llamada “transformación interior” es un mito, lo único que se transforma es la Conciencia, generando nuevos niveles de comprensión, progresivamente más lúcidos, profundos y compasivos.
La transformación del cuerpo no es un trabajo corporal, sino mental. La transformación de la mente no es un trabajo mental, sino de tu Conciencia. Es decir, la transformación es en realidad trascendencia. Esto conlleva algunas consecuencias, porque trascender de verdad constituye una tarea mucho más difícil que maquillar el ego con supuestas cualidades de pureza.

Un día vendrá a ti ese despertar, en el que contemplarás cómo tampoco eres tu mente, sino una Conciencia prístina, que podrá usar a la mente como la mente usa al cuerpo. Sólo entonces te habrás transformado, no porque tu cuerpo o tu mente se hayan convertido en algo diferente a lo que son, sino precisamente porque los has dejado en paz.

Articulo elaborado de notas tomadas de http://guntheremde.blogspot.com y tu ecoach Gaby!!!

No hay comentarios: